OBJETIVOS BIEN FORMULADOS

Una de las habilidades fundamentales en Coaching consiste en ayudar a los demás a definir y consolidar objetivos. Como bien sabemos, la metodología del Coaching en vez de orientarse hacia problemas se enfoca en soluciones y resultados, y en este proceso, la formulación de objetivos es clave.

¿Qué está detrás de un objetivo bien planteado?

Está detrás la motivación hacia eso que deseamos que suceda, que nos mueve a reconocer nuestros recursos, por ende, es una estrategia asociada a algo que queremos que ocurra.

 

Como coaches, la pregunta sobre ¿a dónde quiere ir? despierta en el coachee una luz, un foco. Aunque muchas veces ante esta pregunta aparece el estado problemático de la persona. Algunas preguntas conducentes a la exploración del objetivo son; ¿qué es lo que quieres? ¿cómo te gustaría sentirte? ¿cómo quién quieres hacerlo? Si ya lo estuvieras logrando ¿qué estarías haciendo? ¿qué te gustaría tener más?

¿Qué características tiene un objetivo bien formulado?

Algunos requisitos son los siguientes:

  • Formular el objetivo en términos positivos: ¿qué es lo que quieres?

  • Comprobar el objetivo mediante los sentidos: ¿cómo vas a saber que lo estás logrando? ¿qué estarías sintiendo?

  • Alcanzable: ¿es posible esto para ti?

  • Contextualizado: ¿dónde quieres conseguirlo?

  • Ecológico: ¿qué consecuencias tiene mantener esto?